Añadir el agua hirviendo o muy caliente a la harina, mezclar bien con varillas o cuchara de madera. Pasar la masa, cuando esté tibia, a una mesa enharinada y amasarla.
Una vez la pasta esté fina, cubrir con un paño húmedo y dejar reposar durante 30 minutos. Enrollar la masa para formar un cilindro largo, de unos 3 cm. de grosor.
Cortar con los dedos trozos de unos 2,5 cm. y formar bolitas. Aplastar cada una de esas bolitas en discos de 6-8 cm. Untar un lado del disco con aceite de sésamo y ponerlo contra el lado untado de otro disco.
Enharinar los lados de fuera de los discos y con el rodillo formar con cada pareja de discos otro mayor de unos 12 cm. de diámetro y muy finos de grosor.
Se calienta una sartén a fuego medio, se engrasa con papel absorbente y se pone una de estas parejas de discos y cuando la masa empieza a hacer burbujas, al cabo de 1 1/2 minutos aproximadamente se le da la vuelta y se deja 1 1/2 minutos.
Se retira la pareja de discos de la sartén, se separan con cuidado y se colocan uno sobre otro en un plato pequeño. Se sigue así hasta terminar los crêpes.
Antes de servir, se ponen los crêpes en una rejilla sobre un cazo de agua hirviendo.
Se cubre y se deja al vapor 5 minutos. (Durante la manipulación cubrir, masa, bolas, discos con paño húmedo, para que no se resequen. Una vez cocidos taparlos para evitar el desecado. El motivo de pasarlos por un baño de vapor antes de servirlos, es darles flexibilidad y aportarles algo de humedad, como también calentarlos).
|