En un recipiente de barro cocido se vierte el aguardiente y el azúcar, la proporción de 120 grs. de azúcar por cada litro de aguardiente.
Se añaden mondaduras de limón y los granos de café.
Se remueve y se le planta fuego, con un cazo, en el que previamente habremos colocado un poco de azúcar con aguardiente. Muy despacio, se acerca al recipiente hasta que el fuego pase de uno a otro.
Se remueve hasta que el azúcar se consuma.
En el mismo cazo se echa un poco de azúcar, esta vez en seco, y colocándolo sobre la queimada se mueve hasta convertirlo en almíbar, que se vierte sobre las llamas, y rmeoviendolo.
Esperamos a que las llamas tengan un color azulado. |